Hablamos con Julie S., suscriptora de PrettyLitter, sobre Maka y esto es lo que nos dijo:
Maka tiene actualmente 6 años, es un siamés Lynx Point. Maka fue adoptado originalmente por un joven llamado Adam de la Humane Society. Después de un año, Adam desafortunadamente tuvo que mudarse de nuevo a Hawái, pero no podía llevarse a Maka con él. Me acababa de mudar a un nuevo apartamento y estaba FIRMEMENTE en que no iba a tener más mascotas que mi pez Pascal. No conocía a Adam, pero mi amiga Mandy sí, ella sabía que Maka necesitaba un hogar. Así que me lo pidió. Le dije que no. Me lo volvió a preguntar unos días después. Le dije que no otra vez. Esto continuó durante poco más de un mes. Finalmente, me dijo: "Mira, ve a conocer a este gato y si todavía no lo quieres, ¡dejaré de molestarte!". Puse los ojos en blanco por dentro, pero acepté. Y estoy segura de que puedes imaginar cómo fue. 5 minutos con Maka y supe que me llevaría a ese gato a casa.
Un par de días después, Maka se mudó conmigo. Maka fue mío desde el principio. Dormía boca arriba sobre mí por la noche, aterrorizaba al pobre Pascal, siempre se metía en la despensa (llegué a casa varias veces y encontré harina por toda la casa, maicena derramada por todas partes, cuscús por todas partes). Sabía cómo abrir los armarios y servirse de todo. Así que tuve que proteger mi cocina de mi gato. Hasta el día de hoy, esto sigue siendo necesario. Rápidamente se convirtió en mi mejor amigo. Pasa el rato conmigo constantemente, pero no de una manera molesta, sino más bien como un compañero silencioso.
Un día, mientras me ocupaba de la caja de arena, me di cuenta de que algo no iba bien. Como tenía PrettyLitter, pude ver y detectar de inmediato que había sangre en su orina. Estaba muy enfermo, pero seguía corriendo por mi apartamento parloteando, así que, si no hubiera sido por PrettyLitter, no me habría dado cuenta y podría haber muerto. Tuvo que estar en el veterinario de urgencias durante poco más de 24 horas. Le hicieron ecografías y radiografías; temían que tuviera una obstrucción. Y durante todo el proceso se comportó tan bien; el veterinario me dijo que lo amaban y que era muy dulce. Ahora tiene que estar con un alimento urinario especial para ayudar a prevenir la formación de cristales en su sistema digestivo.
Le compré un gato para que le haga compañía. Se llama Evie. Hasta el día de hoy, si hace algo malo, le pido a Maka que controle a su gato. Es curioso constantemente y se mete en las mejores travesuras.
Un dato curioso sobre mí:
Nos bañamos juntos (NO por elección mía)
Los pasatiempos favoritos de Maka:
Acostado en túneles, atacando mis pies debajo de las sábanas cuando duermo, despertando a toda la casa a las 4:30 cada mañana, metiéndose en cajas pequeñas, bolsas de papel, cajones, cestos de ropa, la secadora, cualquier cosa que quede abierta.
El comportamiento más travieso:
Entrar a la despensa y comer tantas tortillas como pueda antes de que lo atrapen.
Si tu gato pudiera tener una cosa ilimitada por el resto de su vida, ¿qué sería?
Túneles para gatos
¡Gracias por compartir su historia, Julie y Maka!
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