La agresividad en los gatos se refiere a un comportamiento hostil o violento hacia los humanos u otros animales en el hogar. Esto puede manifestarse en forma de juegos bruscos, arañazos, mordeduras, silbidos, orinar o lenguaje corporal agresivo.
La agresividad felina es diferente a la de un juego normal. Los gatos son depredadores naturales, lo que significa que sus sesiones de juego pueden parecer agresivas para un dueño de gato no entrenado. Verás a tus gatos atacándose, lanzándose las patas y mordiéndose el cuello. Pero es la gravedad y la intención del comportamiento del gato lo que lo lleva al límite de la agresividad. Es importante conocer este límite para que puedas protegerte a ti mismo y a los otros animales a los que tu gato podría atacar.
Algunos signos comunes de agresión felina incluyen:
- Lenguaje corporal agresivo (orejas rectas hacia atrás, pelo erizado, cola rígida y recta hacia atrás, mirada directa)
- Bigotes apuntando hacia afuera
- Pupilas dilatadas
- Aplastando con las patas
- Mordaz
- Lucha
- Pulverización
- Gruñendo
- Silbido
Ahora, veamos qué puede causar agresividad en los gatos para que puedas trabajar para minimizarla en tu hogar.
¿Qué causa la agresión en los gatos?
Cada gato es único y tendrá diferentes desencadenantes, pero existen algunas razones comunes por las que un gato puede volverse agresivo. A continuación, se indican algunas:
Hormonas/Madurez sexual
Los gatos alcanzan su madurez adulta máxima alrededor de los 2 años de edad y, a medida que alcanzan esta madurez, pueden experimentar agresividad debido a sus hormonas. Este comportamiento puede empeorar durante la temporada de apareamiento, incluso en el caso de los gatos esterilizados (aunque será mucho menos intenso).
Desacuerdos territoriales
Los gatos son extremadamente territoriales y marcan su territorio con su olor único. Puede surgir una agresión territorial si un gato entra en el territorio de otro gato. Esto es difícil de evitar en una casa con varios gatos, por lo que es importante que cada gato tenga su propio espacio.
El estrés en su entorno
Los factores estresantes en el entorno de un gato, como muebles nuevos, olores diferentes o incluso el cambio de estaciones, pueden provocar agresividad felina. Es posible que actúen con miedo o a la defensiva si no reconocen estos cambios.
Nuevos miembros de la familia o mascotas
Hablando de cambios en el entorno de un gato, la introducción de nuevas personas o mascotas puede hacer que un gato se vuelva agresivo. Para algunos gatos tímidos, incluso recibir invitados puede hacerlos agresivos o hacer que corran y se escondan. La Sociedad Protectora de Animales recomienda introducir nuevas mascotas lentamente y crear asociaciones positivas entre las dos para minimizar la agresión felina.
Choques de personalidad
Todos los gatos tienen personalidades únicas y, lamentablemente, a veces esas personalidades no se llevan bien. Los gatos más asertivos pueden intimidar a un gato tímido, o los gatos mayores y más establecidos pueden intimidar a un gatito nuevo. Cuando esto sucede, es importante redirigir la agresión a un juguete, en lugar de a otra mascota.
Miedo
Por último, un gato miedoso puede ser un gato agresivo. La agresión por miedo en los gatos puede hacer que arremetan si tienen miedo de su entorno, de algo que sucede en el exterior, de otro gato o de una persona de la casa. Estos comportamientos agresivos pueden incluir silbidos, arañazos y arquear la espalda con el pelo erizado. Si este es el caso, debes considerar cómo tu entorno puede estar provocando la agresión por miedo.
Cómo detener la agresividad en los gatos
Al identificar la causa raíz del comportamiento agresivo de su gato, puede detener la agresión y crear un hogar saludable y libre de estrés para usted, su gatito y cualquier otra mascota en el hogar.
A continuación se ofrecen algunos consejos importantes sobre cómo detener la agresividad felina.
Esterilice a su gato
La primera forma de detener la agresividad en los gatos, especialmente en los machos, es esterilizarlos. La esterilización no solo tiene muchos beneficios para la salud (desde la prevención del cáncer hasta una vida más larga), sino que también ayudará a frenar el comportamiento destructivo y agresivo. Los gatos no esterilizados tienen más probabilidades de marcar su territorio con orina y tratarán de atacar tanto a los gatos machos como a las hembras en el hogar durante la temporada de apareamiento.
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Crea una rutina saludable
Los gatos son animales de hábitos y aprecian una rutina constante en casa. Cualquier cambio en la rutina puede causarles estrés, lo que puede derivar en un comportamiento agresivo. Si es posible, alimente a su gato a la misma hora todos los días y mantenga siempre sus cajas de arena, comida y agua en el mismo lugar para que pueda encontrarlos fácilmente.
Dales mucho espacio
Como mencionamos, los gatos son extremadamente territoriales y pueden atacar a otros gatos si entran en su espacio. Los gatos que viven en el interior pueden tener un espacio limitado, pero hay algunas cosas que puedes hacer para que tu gato se sienta cómodo en su propio territorio.
Tenga lugares para que sus gatos corran y se escondan que estén a distintos niveles, como alféizares de ventanas, estantes o torres para gatos. A los gatos les encanta correr y trepar, y estos espacios verticales pueden agregar mucho más espacio, incluso en una casa más pequeña.
Además, distribuye las cajas de arena por toda la casa para que cada gato tenga un lugar seguro y tranquilo donde ir. Los gatos pueden volverse muy territoriales con respecto a su caja de arena porque es un lugar donde se sienten vulnerables. Ten siempre suficientes cajas de arena (una más que la cantidad de gatos que tienes) y colócalas en un lugar donde tu gato se sienta seguro. El mejor lugar para colocar una caja de arena es lejos de otras mascotas para evitar causar agresión territorial.
Alimentarlos por separado
Por último, los gatos pueden volverse territoriales y agresivos con la comida, así que asegúrate siempre de alimentarlos lo suficiente y, si es posible, hazlo en lugares separados para que la hora de comer no desencadene una agresión por la comida. Los recursos limitados (comida, cajas de arena, agua, cariño, etc.) pueden provocar un comportamiento agresivo, por lo que crear un hogar con una cantidad suficiente de estos recursos puede ayudar a prevenir la agresión felina.
Cada gato es un poco diferente, pero estos consejos te ayudarán a entender cómo se manifiesta la agresividad en los gatos y qué puedes hacer para detenerla. Al crear un hogar seguro, puedes limitar el comportamiento agresivo y vivir en paz con tus amigos peludos.
Fuentes:
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